El coche sensato

Mientras los accidentes de tráfico y las víctimas mortales siguen en aumento -en el pasado puente de la Constitución las cifras de fallecidos fueron de escándado en todo el Estado- el Gobierno propone retiradas inmediatas del carnet y en nuestra Comunitat se intensifican las campañas con profusión de controles de alcoholemia. La primera medida es discutible y la segunda no está nunca de más, pero creo que no se ataca el problema de frente. Una de las causas que más accidentes provocan es el consumo de alcohol. Desde hace años se está arrinconando a los fumadores y se adoptan medidas para que el cigarrillo pase a mejor vida. Cualquiera con dos dedos de frente, por muy fumador que sea, no tiene argumentos para defender el uso del tabaco. Pero ¿y el alcohol? Me pregunto por qué no se colocan etiquetas en las botellas que digan algo así como «El alcohol también mata». Pero no, tranquilos que eso no va a ocurrir de momento porque hay demasiados intereses creados. Además, dentro de las normas de conducta que imperan en nuestra sociedad, si vas a una cena y no te bebes los cuatro o cinco vasos de vino y lo que venga, no eres normal. Si no fumas eres una persona sana pero, si no bebes eres raro. Incluso, coger una buena castaña y mantenerse en pie es signo de hombría y, si eres mujer, al contrario que hace unos años, es hasta motivo de comentarios divertidos. Así, entre conductores al volante con copas de más, autopistas que no son tal, carreteras en mal estado y conductores que tienen el carnet por obra y gracia del espíritu santo, tenemos un cóctel siempre a punto para estallar. Desde la época del Seat 600 el turismo ha tenido grandes adelantos. Hay coches inteligentes, con airbag, virguerías electrónicas, modelos aeordinámicos, asientos abatibles para diversos usos, y hasta los hay que llevan un minibar incorporado. No estaría mal que se fabricara el coche sensato, con un sistema incorporado que, al detectar que la persona que se pone al volante lleva unas copas de más, no se ponga en marcha. ¿Lo compraría usted?