G.Picó13/02/04 0:00
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La Audiencia de Palma ha condenado a nueve años y seis meses de cárcel a un rumano de 20 años años por apuñalar en varias ocasiones a un compatriota que resultó herido muy grave en un club de alterne de Palma. El tribunal de la Sección Primera ha considerado a Anatoly Syrota responsable de un delito de asesinato intentado y también le ha condenado a pagar una indeminzación de 16.275,11 euros. Se da la circunstancia que la víctima, llamada Dimitro Borodavkin, logró sobrevivir a las graves lesiones que le causó el condenado, pero falleció seis meses después en otro club de alterne del barrio chino de Palma a causa de una sobredósis. La madre de la víctima, que sostiene que su hijo no murió de sobredosis sino que fue asesinado ya que tenía cocaína en la boca, recibirá la indemnización fijada por la Audiencia de Palma. La defensa del condenado indicó que recurrirá la sentencia.

Los hechos sucedieron alrededor de las cuatro de la madrugada del 25 de marzo de 2003 en un club de alterne de la calle Jeroni Pou de Palma. Tanto el condenado Anatoly Syrota, como la víctima Dimitro Borodavkin, asistida por el abogado Ricard Mesquida, frecuentaban ese local. Ambos se conocían pero no se llevaban bien desde hacía un tiempo. La noche de los hechos Dimitro llevaba bastante rato sentado en la barra y entró Anatoly. A indicación de éste, Dimitro salió tras él y en el rellano, al otro lado de la puerta, ambos empezaron a discutir. Según la sentencia, Dimitro propinó un puñetazo a Anatoly en el hombro y éste lo empujó. Después sacó «un cuchillo de cocina de hoja de unos dos dedos de ancho y de casi un palmo de longitud y se lo clavó a Dimitro en la zona abdominal».

Seguidamente empezó a acuchillar de nuevo a la víctima, llegando a tenerla «con la cabeza en medio de sus piernas, tumbada en los peldaños de la escalera, donde prosiguió el acuchillamiento levantando y bajando repetidamente el arma».

El portero del local, «unos diez o 15 minutos después» de que ambos saliesen por la puerta, los encontró peleándose y apartó de una patada al agresor pero éste «asió por la ropa a Dimitro y levantándolo, ya mal herido, lo volvió a acuchillar». La víctima aún tuvo fuerzas para levantarse y salió a la calle, pero allí fue apuñalado de nuevo y quedó tendido en la vía pública «a unos 40 metros» del local. Después el agresor huyó del lugar. La víctima, «a consecuencia de al menos seis cuchilladas», sufrió lesiones muy graves. Algunas de las puñaladas le alcanzaron órganos vitales, pero logró sobrevivir. La policía arrestó poco después a Anatoly. En principio, el Ministerio Fiscal solicitaba una pena de 14 años para el joven rumano, que finalmente ha sido condenado a nueve años y seis meses de cárcel.