La Sección Segunda de la Audiencia de Palma ha absuelto de un
delito contra la salud pública al propietario de una carnicería y a
dos matarifes que sacrificaban animales en un matadero ilegal de sa
Pobla. Pese a que el titular del Juzgado de lo Penal número 7 de
Palma también había dictado una sentencia absolutoria, el fiscal
presentó un recurso y solicitaba dos años de cárcel y multa de doce
mil euros para cada uno.
El tribunal, sin embargo, se remitió al antiguo Código Penal
(anterior al año 1995) para llegar a la conclusión de que bajo ese
texto legal, el supuesto delito pasaba a ser una simple infracción
administrativa. El propietario de la carnicería fue defendido por
el abogado Gabriel García, y los dos matarifes, por los letrados
Fluxá y Arrom. El fiscal entendía que entre los meses de enero y
junio de 2000, los tres acusados fueron responsables directos de
haber sacrificado unas mil ovejas en un matadero ilegal. La carne
era después vendida para su consumo. Los sacrificios se llevaban a
cabo en una nave situada entre sa Pobla y Alcúdia. El caso fue
investigado por la UDYCO del Cuerpo Nacional de Policía de Palma.
El día siete de junio de 2000 se precintó la nave, estando presente
personal de la entonces Conselleria de Sanitat. En principio se
detuvo a cuatro personas, el dueño de una carnicería de sa Pobla,
su esposa y dos matarifes, pero después la mujer quedó exculpada.
Los policías intervinieron documentación, según la cual la carne se
distribuía a distintas empresas y locales de la Isla, y también se
vendía en la carnicería del acusado.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.