El ladrón se quedó atrapado y al intentar huir se precipitó desde cinco metros. FOTO: J.VIDAL

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Henry H.C. no tuvo ayer su día. Este uruguayo, de unos 40 años, planeó atracar la sucursal de «Sa Nostra» en Campanet. Al final, acabó encerrado en el banco y cuando trataba de huir trepando por una canaleta se precipitó al vació y resultó herido de gravedad.

El sudamericano, que cuenta con antecedentes policiales, y un compinche llegaron a la plaza Major de Campanet pasadas las dos y media de la tarde, a bordo de un vehículo. Henry se apeó y su compañero le esperó al volante, dispuesto a escapar en cuanto saliera. Pero las cosas se torcieron desde el principio. El encargado de la sucursal, que había sido amenazado para que le entregara todo el dinero disponible, aprovechó un descuido del uruguayo y consiguió salir a la calle, dejándolo encerrado en el interior. El atracador llevaba consigo una porra eléctrica, que de poco le sirvió contra los cristales blindados del local. La alarma alertó a la Guardia Civil y el asaltante, presa de un ataque de nervios, consiguió acceder al patio interior. Desde ahí comenzó a trepar por un canalón. Su intención era llegar hasta una ventana, saltar al interior de una casa y luego deslizarse hasta la acera, para subirse al coche que le esperaba en la calle y huir. Sin embargo, cuando estaba a una altura de unos cinco metros se cayó de espaldas contra el suelo. Los agentes de la Benemérita lo encontraron malherido y doliéndose de sus lesiones, y esperaron la llegada de una ambulancia del 061, mientras lo vigilaban a una discreta distancia. Según parece, había conseguido apoderarse de unos 1.000 euros, que le fueron intervenidos. Su acólito, que había estado esperando en la calle, se dio a la fuga en cuanto vio que Henry no salía del banco. La Policía Judicial montó un amplio dispositivo de búsqueda en las carreteras próximas y estableció algunos controles hacia Palma y a la salida de Inca, que fueron infructuosos.

El herido fue trasladado en ambulancia hasta Son Dureta, custodiado por guardias civiles, y los facultativos que lo examinaron le apreciaron lesiones internas graves, con un posible riñón afectado. Además, presentaba lesiones en la columna vertebral, un corte profundo en una mano y tenía la pelvis fracturada. Al cierre de esta edición, el atracador había sido intervenido quirúrgicamente y su estado era grave.