Detenido un matrimonio y sus dos hijos por vender 'coca' en su piso de Cala Rajada

Hace un mes, aproximadamente, la Benemérita recibió un 'soplo' de un vecino, en el que contaba que esa familia gitana se estaba dedicando a la venta de cocaína en su primer piso de la calle Issac Peral, en el centro de Cala Rajada. Poco después llegaron a oídos de los investigadores más quejas vecinales. En el edificio en cuestión, de reciente construcción, y en los alrededores casi todos sabían a qué se estaba dedicando ese clan y llegó a crearse una cierta alarma. La Policía Judicial de Manacor y la Guardia Civil de Artà colaboraron en las pesquisas, que se desarrollaron de forma discreta. De hecho, ninguno de los cuatro miembros investigados supo en ningún momento que estaba siendo seguido.

Así pues, se acreditó que Juan, María del Rosario y sus dos hijos se dedicaban al narcotráfico y la operación se diseñó para el jueves por la tarde. A las 15.00 horas un operativo de 25 efectivos tomó posiciones. A las siete, con todo preparado, apareció la secretaria judicial y el grupo se las ingenió para acceder al piso antes de que los propietarios pudieran deshacerse de la droga. En su interior se localizaron 18 papelinas de cocaína, con un peso total de 22 gramos y listas para la venta. La Guardia Civil cree que la familia estaba preparando las dosis del fin de semana. Un perro de la Unidad Canina participó en el registro del domicilio, según confirmaron en fuentes del juzgado.