La insistencia de las lluvias provocó también que las obras del
túnel de sa Mola, en la boca sur, obligaran a restringir
parcialmente el tránsito de la carretera que conduce al Port,
debido a que ésta quedó completamente llena de barro que provenía
del movimiento de tierras que conlleva la obra.
Muy cercano a la boca sur, el torrente Major que discurre
paralelo a la carretera comarcal hizo también temer lo peor, pero
al final éste no se desbordó, pese a que iba «al máximo» según
señalaron fuentes de los servicios de emergencias. Sin embargo, la
Policía Local de Sóller informó del desalojo «por precaución» de
las escuelas del Port de Sóller, ante la peligrosidad que supondría
un posible desbordamiento.
Bomberos de Mallorca en Sóller contabilizaron alrededor de unas
25 salidas durante todo el día de ayer, mayoritariamente por la
mañana, en las que intervinieron en inundaciones de sótanos y
aparcamientos.
En Deià también se vivieron horas delicadas. Los 160 l/m que
cayeron desde la noche del 31 hasta ayer por la mañana provocaron
la incomunicación de algunas viviendas, como la de Can Borràs. A su
vez, algunos márgenes de la localidad se desplumaron, quedando la
carretera que lleva a Valldemossa afectada.
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