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EFE-BARCELONA
Las lluvias tormentosas que cayeron ayer en las comarcas del Maresme y la Selva arrastraron hasta cerca del mar una veintena de vehículos aparcados en la riera de Capaspre de Calella. Según informaron los Bomberos de la Generalitat, otros cuatro vehículos fueron arrastrados hasta el mar, por lo que se desplazaron a la zona cinco dotaciones de los bomberos y una lancha de Salvamento Marítimo para retirarlos y comprobar que no se habían producido desgracias personales. Por otro lado, el aguacero caído en Pineda de Mar provocó el hundimiento, la noche del viernes, de una caseta de feria instalada en el paseo marítimo que estuvo a punto de caer sobre la catenaria, aunque no hubo víctimas.

A esa misma hora, en Sant Pol de Mar se desplomó el techo de una fábrica situada en el polígono industrial. A causa de las tormentas los bomberos retiraron vehículos embarrancados en las rieras de Canet de Mar y Santa Susanna y en la N-2.