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La Policía Local de Palma y los Bombers precintaron ayer por la mañana la zona aledaña de un edificio de nueve plantas, del que se desprendió parte de una cornisa.

El incidente ocurrió sobre las 10.00 horas, en la finca que hace esquina con las calles Rafael Rodríguez Méndez y Bernat Amer, junto a la plaza Fortí. En el noveno piso se estaban realizando unas obras de reforma de una cornisa, cuando parte de la misma se desprendió y cayó sobre la acera.

Según el constructor, el desprendimiento se debió a que había demasiado peso sobre la cornisa, causando que cerca de dos metros y medio de hormigón cayesen desde más de 20 metros de altura.

En su caída, los cascotes se encontraron con una red colocada precisamente para contener cualquier posible desprendimiento. Sin embargo, el excesivo peso de los cascotes reventó la red.

En ese preciso momento una mujer paseaba por debajo de la finca. Los escombros cayeron a escasa distancia y le rebotaron en un pie. La mujer no sufrió heridas y rechazó la asistencia médica, aunque varios policías permanecieron con ella debido a que se encontraba muy nerviosa. Parte de los escombros destrozaron la tapa de una alcantarilla y hundieron un cuadro eléctrico.

Al lugar se desplazaron técnicos de GESA, tres unidades de la policía local y un camión de bomberos. Mediante una escalera mecánica, dos de ellos inspeccionaron la fachada para evaluar los daños y los posibles riesgos de nuevos desprendimientos, mientras los vecinos y curiosos se apiñaban en los alrededores para observar los daños.