Un joven de 20 años murió ayer tarde en Son Dureta horas después de precipitarse de un octavo piso en el Passeig Marítim de Palma.
La caída se produjo al mediodía, cuando en la vivienda se encontraban la víctima, su hermano y la mujer de la limpieza. Ninguna de esas dos personas se dio cuenta de lo que había ocurrido hasta que la noticia del accidente se propagó por todo el edificio de Palma Real.
El muchacho, antes de estrellarse contra el suelo, junto a la piscina, impactó contra las ramas de una palmera, que le amortiguaron el impacto. El centro de emergencias del 112 puso en marcha el dispositivo de emergencia, en el que participaron distintas unidades de la Policía Local, una ambulancia del 061 y patrullas del Cuerpo Nacional de Policía. Los funcionarios cortaron durante unos minutos uno de los carriles del Passeig Marítim para agilizar el traslado del joven a Son Dureta, ya que estaba en estado crítico y se temía por su vida. En urgencias comprobaron que presentaba fracturas y golpes en casi todo el cuerpo y pasó, sin dilación, al quirófano, donde trataron de estabilizar sus lesiones. Horas después falleció. La Policía ha abierto una investigación para tratar de determinar las circunstancias en las que se produjo la caída. Un psicólogo fue movilizado para atender a la familia.
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