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JOAN J. SERRA/AGENCIAS
El Consejo de Ministros aprobó ayer abrir una línea de ayudas para compensar a los damnificados por la fuerte tormenta que el pasado jueves azotó Mallorca.

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, deseó una pronta recuperación a los heridos por la tormenta y lamentó los desperfectos y trastornos que la tromba de agua y viento causó en Palma. Las ayudas están directamente habilitadas para atender a las familias afectadas y colaborar con las entidades locales en las tareas de reconstrucción.

El Govern reveló que Fernández de la Vega se puso en contacto en la noche del jueves con el Ejecutivo autonómico, «preocupada» por los efectos de la tormenta.

Por su parte, el president del Govern, Francesc Antich, anunció ayer que el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos, se desplazará hoy a Mallorca para evaluar los daños del vendaval y subrayó también la celeridad del Gobierno en establecer ayudas para los afectados.

Antich hizo estas manifestaciones en el transcurso de una visita al polígono de can Valero, una de las zonas más castigadas por la tormenta, que recorrió en compañía de otros miembros del Govern; la alcaldesa de Palma, Aina Calvo; y representantes de Pimeco, Afedeco, CAEB y Asima.

El president habló con empresarios y trabajadores de can Valero que en ese momento se dedicaban a retirar escombros y materiales afectados por la tormenta.

Antich evitó hacer ningún reproche al Centre Meteorològic, puesto que el de anteayer fue un fenómeno súbito y, por tanto, «difícil de predecir».
Joan Manel Serra, miembro de la directiva de la Associació Industrial de Mallorca (Asima), que gestiona los polígono de Son Castelló y can Valero, declaró ayer que «la situación en esta última zona es parecida a la del efecto de una bomba. Son numerosas las naves industriales destrozadas y algunas de ellas están en auténtico estado de ruina, totalmente inservibles».

Para Serra, «todavía es pronto para una valoración de daños y estamos a la espera de las ayudas que concedan las Administraciones. A todo ello se añaden los desperfectos en muchos vehículos que han recibido impactos de paredes, techumbres, ramas, etc.».

El directivo de Asima expresó su preocupación por los pequeños empresarios, «pues, pese a lo que puedan cubrir los seguros, lo tendrán difícil para salir adelante».

Por su parte, la consellera d'Interior, Àngeles Leciñena, destacó la necesidad de «mejorar las comunicaciones del servicio 112, pues sufrimos una saturación de líneas. El jueves por la tarde recibimos 1.400 llamadas».