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PEP MATAS
Quizás, sí. Quizás el derrumbe del techo de una planta baja ubicada en la calle Crédito Balear, en Palma, ocurrido ayer noche, pueda incluirse dentro del apartado de daños colaterales por la tormenta del pasado jueves. Pero está claro, o eso parece, que la caida del 'totem' de la empresa McDonalds de la barriada palmesana de Son Dameto, que provocó heridas a dos adolescente, es algo que, no es que podría haberse evitado, es que no tendría que haber ocurrido.

Del caso saben mucho los integrantes de la Asociación de Vecinos de Son Dameto que, desde 2005, cuando se inauguró el centro comercial, enviaron documentación a Cort en el cual señalaban que el 'totem' era ilegal. Los vecinos aportaban datos y señalaban que la 'torre', que medía 27 metros, sobrepasaba con mucho la altura permitida. Se especificaba que dicha instalación vulneraba una ordenanza del Plan General de Ordenación Urbana. Los vecinos solicitaban que el Ajuntament ordenara a McDonalds que redujera la altura del poste a la que se regula en el PGOU, es decir, a diez metros. El 11 de mayo de 2005 Cort contestó a los vecinos que el 'totem' no constaba en ninguno de los proyectos presentados por la empresa para instalar el centro en la zona, y se añadía en el escrito que, por lo tanto, no tenía la empresa licencia de obras para instalar el monolito, por lo que se pasaba el expediente al Departamento de Disciplina Urbanística. Pero nada cambió y los vecinos enviaron otro escrito a Cort el pasado mes. La contestación fue que el anterior consistorio archivó el expediente de infracción urbanística, y se entiende que el 'totem' tenía la licencia de obras. Por ello, y en base a los estudios jurídicos, no se encontraron motivos suficientes para revisar de oficio la licencia que se concedió en su día. La tarde del pasado jueves el 'totem' cayó y las consecuencias fueron graves para un adolescente, y menos graves para otro.

Con respecto al derrumbe de ayer noche, al lugar se desplazaron efectivos de la UII de la Policía Local, efectivos del Cos de Bombers, ambulancias del 061, agentes del CNP y una UVI, ante el temor de que pudiera haber personas atrapadas en el interior. La zona se acordonó y se estuvo buscando entre los escombros.

El suceso se registró sobre las nueve y media de la noche y, por fortuna, una media hora después se confirmó que la vivienda estaba vacía.