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Palma, dos de la madrugada de ayer. Los vecinos de un edificio de la calle Eusebi Estada escuchan una discusión entre una pareja en un quinto piso. No es la primera vez que oyen salir gritos de esa vivienda, pero como la pelea sube de tono y la mujer pide auxilio, los vecinos deciden llamar a la policía.

En breve, dos indicativos del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) se desplazaron al lugar. Los agentes subieron hasta el quinto piso y llamaron a la puerta. Nadie abrió, pero dentro oyeron a una mujer pidiendo ayuda. Al parecer, la discusión entre el hombre y la víctima se había producido por un tema de celos. Ante las sospechas de que se pudiera estar cometiendo algún hecho delictivo, los policías decidieron abrir la puerta por la fuerza.

La entrada del piso es estrecha y sólo cabe una persona. Entró un primer agente y se encontró con el sospechoso de frente, quien empezó a golpearle.
El agente se protegió como pudo y su compañero, que iba detrás, también logró entrar en la casa. Sin embargo, el supuesto maltratador, identificado como Simon K., de 31 años, y natural de Camerún, siguió resistiéndose y también la emprendió a golpes con el segundo policía, e intentó quitarles la porra y golpearlos.

Los agentes lograron que el agresor retrocediese un poco pero éste cogió una cuna, en cuyo interior no había ningún bebé, y se la lanzó a los policías. La cuna se rompió y en ese momento, Simon K. cogió uno de los barrotes y continuó golpeando a los policías. Finalmente, los agentes acorralaron al agresor, pero éste se negó a ser reducido y decidió huir, aunque no por la mejor vía de escape.

Simon K. salió por una ventana que da al patio interior y decidió descolgarse hasta el suelo por una tubería de gas, a pesar de que estaba en un quinto piso. El camerunés empezó a bajar pero cuando estaba un piso más abajo, la tubería no soportó el peso y cedió. Así, el sospechoso se precipitó al vacío y cayó desde una altura de unos doce metros. El impacto fue tremendo y sufrió lesiones muy graves.

Simon K, cayó en el patio de luces, junto a la parte trasera de un bar que hay en la planta baja del inmueble. Sanitarios del 061 y de los Bombers de Palma también se personaron en el inmueble. Los primeros para asistir al herido y los segundos para comprobar si había una fuga de gas ya que la tubería se había desprendido de la fachada. También se solicitó la presencia de los Bombers para abrir las puertas de un negocio que dan acceso al patio interior. No obstante, se localizó a una persona que tenía las llaves de una de las puertas y los efectivos de los servicios de emergencia pudieron llegar hasta el herido.