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A finales del próximo mes de febrero empezarán a funcionar los cinco radares fijos que se están instalando en distintos puntos de las carreteras de Mallorca. Así lo anunció ayer el delegado del Gobierno en Balears, Ramon Socías, quien compareció en rueda de prensa junto a la directora provincial de Tráfico, María Teresa Sau, para valorar la siniestralidad en las carreteras de las Islas durante el año 2007.

Dos radares se instalarán en la vía de cintura, uno en el kilómetro 10'3 en sentido a Palma y otro en el kilómetro 10 en sentido a Andratx; dos más se colocarán en la autopista de Inca, en el kilómetro 9 en dirección a Palma y en el 16'1 en sentido a Inca; y el quinto radar se ubicará en el kilómetro 9 de la autopista de Llucmajor, en sentido a este municipio. Además, se instalarán dos radares más en Eivissa, en la carretera de Sant Antoni; y otros dos en la vía de Maó a Ciutadella. El delegado indicó que la finalidad de estos radares no es recaudatoria sino disuasoria, por lo que «se informará a los conductores de la presencia de estos radares para que no corran sino que aminoren la velocidad».

El año pasado se registraron 104 fallecidos por accidentes de tráfico en las carreteras de Balears, dos más que en 2006. Al respecto, Socías dijo: «Aunque es el segundo mejor año desde 1983, no podemos estar contentos porque se ha vuelto a superar los cien muertos y tenemos que seguir trabajando» para reducir la siniestralidad. El delegado matizó que mientras en Menorca y en Eivissa ha disminuido, en Mallorca «el comportamiento ha sido muy malo» en 2007, ya que se produjeron 80 accidentes mortales con el balance de 86 fallecidos.

Un dato que resaltó Socías fue que de las 104 víctimas, 33 tenían menos de 30 años, «y esto es un coste social y humano que no podemos dejar de lado y las instituciones tenemos que trabajar para parar esta sangría».

El delegado recordó que las causas de los accidentes mortales siguen siendo las de siempre, es decir, el exceso de velocidad, la distracción o somnolencia de los conductores y conducir bajo los efectos de las drogas o el alcohol. En referencia a las nuevas medidas que se han puesto en marcha para reducir la siniestralidad, Socías informó que desde la entrada en vigor del carné por puntos, en el verano de 2006, 10 conductores de Balears se han quedado sin permiso de conducir y 31 más han perdido todos los puntos y están esperando que se les comunique que también se han quedado sin carné.