TW
0
JAVIER JIMÉNEZ Aina Vadell, la monitora palmesana que está en coma tras salvar a sus alumnos cuando iban a ser atropellados en la calle Eusebio Estada, ya respira por sí misma, aunque su estado sigue siendo muy grave.

Su familia explicó ayer que «los médicos le irán retirando la sedación de forma paulatina y para nosotros esta ligera mejoría es un rayo de esperanza». Aina Vadell, que tiene 20 años, se encuentra hospitalizada en la UCI de la clínica Juaneda y cada día su familia recibe la visita de amigos. «Queremos que al menos su caso sirva para concienciar a los conductores de los peligros de una conducción imprudente», cuentan sus allegados.

El sábado 19 de abril Aina, que estudiaba segundo de Fisioterapia en la UIB, cruzó con diez alumnos por un semáforo en verde en la confluencia de las calles Eusebio Estada con Francisco Sancho. La monitora, atenta como siempre a cualquier detalle que pudiera representar peligro para sus chicos, reparó en un turismo que se dirigía a ellos a elevada velocidad. El coche tenía el semáforo en rojo, pero el conductor no se dio cuenta y se llevó por delante a la joven palmesana. Aina todavía tuvo tiempo de empujar a sus alumnos rezagados y ninguno resultó herido. su heroicidad le costó muy caro: sufrió lesiones muy graves en la zona craneal, además de fracturas y contusiones en distintas partes del cuerpo, y quedó en coma.

Desde ese momento su familia no ha dejado de recibir muestras de apoyo. El pasado fin de semana los clubs d'esplai, a los que ella pertenecía, montaron una fiesta en la Plaça Alenxander Fleming y se la dedicaron a ella. Desde el Ajuntament palmesano también se le hizo una mención especial para reconocer su valerosa actuación.

Con la noticia de que le han retirado la respiración artificial su familia y amigos ve la luz al final del túnel.