TW
0
AGUSTÍN AGUILÓ La Audiencia Provincial de Palma ha condenado a diez años de cárcel a un padre por abusar sexualmente de su hijo, menor de edad, durante cinco años. La madre del pequeño también ha sido castigada con una pena de tres años y seis meses de prisión por no haber hecho lo suficiente para evitar que su esposo abusara de su propio hijo.


Además, el padre y la madre no podrán acercarse al menor durante once y seis años respectivamente.
Con el fallo de la sentencia dictada por la Sección Primera, ha quedado probado que el procesado, sacándose su órgano genital de la ropa y diciéndole a su hijo que era «la trompa de un elefante», le pedía que le masturbara hasta que el padre condenado, eyaculaba ya en la boca del menor, ya sobre su ropa. Tales hechos se repitieron durante cinco años, esto es, desde que el pequeño tenía cuatro años hasta que cumplió nueve e intervinieron los servicios sociales
Durante el juicio, que se celebró el pasado 24 de junio, los dos progenitores de la víctima se declararon inocentes, y abogaron a la imaginación de su hijo.

También en la vista, el menor, que se encuentra en un centro de acogida en la Península, explicó con detalle a la sala y por videoconferencia, las agresiones sexuales que sufrió por parte de su progenitor.

Los abusos, según declaró el niño, se iniciaron cuando tenía cuatro años de edad y, según él, consistían en practicarle felaciones y masturbaciones a su padre. «Me decía que era la trompa de un elefante y después me hacía tragar el líquido, yo lo hacía por miedo», indicó el menor.

Cuando el fiscal le preguntó cómo se encontraba en el centro de acogida, el menor manifestó estar «mejor que cuando estaba en mi casa, estoy más protegido, allí no estaba bien».

Los expertos forenses coincidieron en calificar la declaración del menor como «fiable».