La policía desarticula en Palma una red de explotación sexual de mujeres búlgaras

Los hechos se remontan al pasado mes de julio, instante en el que se recibió una denuncia en las dependencias policiales por parte de una mujer de nacionalidad búlgara, la cual manifestó que había sido víctima de una red de captación de mujeres en su país de origen, trasladándola a España y una vez en nuestro país fue obligada ha ser explotada sexualmente.

La investigación de los agentes de la UCRIF comenzó inmediatamente, y tras numerosas pesquisas se consiguió localizar a los responsables directos de la trama y otros integrantes de la red que participaron en cometer las supuestas ilegalidades. En el transcurso de la operación también se consiguió identificar a otras mujeres implicadas en la red de prostitución.

Falsas ofertas
El 'modus operandi' de la organización consistía en iniciar su actividad en Bulgaria, donde una de las integrantes se dedicaría a captar a mujeres dispuestas a trasladarse a España para trabajar cuidando niños o personas de avanzada edad. Una vez que las mujeres aceptaban la supuesta oferta laboral, abandonaban sus vidas y trabajos en su país natal y se trasladaban a la Isla, concretamente a Palma acompañadas por integrantes del grupo organizado. De camino a España era el momento en el que las mujeres eran informadas de que el trabajo ofrecido no existía y debían trabajar ejerciendo la prostitución, entregando a los mismos la totalidad del dinero obtenido.

En los casos en que algunas de las mujeres se negasen a ejercer la prostitución eran sometidas a violencia por parte de los integrantes de la organización para conseguir sus objetivos, incluso les retiraban en alguna ocasión sus pasaportes y cualquier tipo de documentación, impidiendo que las víctimas pudiesen regresar a su país, obligando en algunos casos también mediante la violencia física, a que las víctimas mantuviesen relaciones sexuales con ellos. Finalmente, entre los días 12 y 13 de agosto se procedió a la detención por parte de agentes de la UCRIF de seis personas, cinco hombres y una mujer, entre ellos el considerado como el jefe de dicha organización de prostitución y explotación de mujeres búlgaras.

Todos los detenidos son de nacionalidad búlgara y tienen edades comprendidas entre los 25 y 37 años. Los arrestados fueron trasladados a las dependencias policiales para prestar declaración, y están acusados de asociación ilícita, cargos en referencia a los derechos de los trabajadores, otros relativos a la prostitución. Otra de las acusaciones que se están investigando es una violación a una de las víctimas, que quedó embarazada y luego fue obligada a abortar.

La cúpula de la red desarticulada fue presentada ayer ante el Juzgado de Instrucción número 8 de Palma, que se encontraba en funciones de guardia.