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OTR/PRESS Una nueva víctima de la violencia de género se registró ayer en Santa Cruz de Tenerife. La joven, K.Z, de 26 años y nacionalidad letona, tenía una orden de protección, sin embargo, eso no impidió que su ex pareja acabara con su vida tras apuñalarla en su casa de la capital tinerfeña. El sospechoso se encuentra en búsqueda y captura y tenía una orden de alejamiento sobre la víctima. Quienes sí han conseguido detener al supuesto agresor son los agentes de la policía de Vigo, quienes arrestaron ayer al supuesto asesino de la joven brasileña de 25 años que el pasado domingo apareció muerta con varios golpes en la ciudad olívica.

La fallecida en la isla canaria se convierte en la víctima 46 de la violencia de género en España en lo que va de año, según ha señalado la Delegación del Gobierno en Canarias, quien también confirmó que la joven tenía una orden de protección del Juzgado de Violencia de Arona, cuyo expediente se había examinado en tres ocasiones. Dicho expediente determinaba que el riesgo que se le había detectado había pasado de 'medio' a 'bajo' en la última de la revisiones.

Sin embargo, esta orden no ha servido para impedir que sobre las 00.50 horas de ayer, la policía encontrara el cuerpo de la mujer en su domicilio en Guargacho, en el municipio de San Miguel, con varias heridas de arma blanca. Sus vecinos dieron la alarma. Tampoco ha servido de nada la orden de alejamiento que el supuesto agresor, que tras el suceso se dio a la fuga, tenía sobre la joven.

En Vigo, funcionarios del CNP han dado con el paradero de uno de los últimos agresores, la pareja de una joven brasileña de 25 años, que apareció muerta el pasado domingo en su piso de la Travesía de Vigo a causa de varios golpes. Según fuentes de las fuerzas de seguridad, el hombre fue detenido gracias a la colaboración ciudadana en una pizzería.

Cuando los agentes llegaron al local, unas tres horas después de que se descubriera el cuerpo sin vida de la joven, el individuo, también brasileño de 44 años de edad e iniciales M.D.D.S., puso sus manos en alto, por lo que no opuso ningún tipo de resistencia a la hora de ser arrestado.