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ÀLEX CABOT José Fernández Vázquez era un experimentado piloto de aeronaves Airbus de la compañía Spanair. El pasado miércoles iba a bordo del avión siniestrado. Lo hacía como tripulante en tránsito para, una vez en Canarias, pilotar una de las mayores naves de Spanair hacia otro destino.

El piloto estaba casado con María Soledad Rocafull Gimeno, pediatra del centro de salud Martí i Serra de Marratxí, tal y como confirmó Gerencia de Atención Primaria de la Conselleria de Salut i Consum.

Fernández Vázquez tenía unos sesenta años y fruto de su matrimonio con María Soledad tuvo un hijo y una hija, que tras cursar sus estudios superiores ahora viven en la Península.

La familia tiene un bonito chalet en la urbanización Sant Marçal de Marratxí, donde, según una vecina, pasaban sus vacaciones todos juntos: «Hace unos días estaban todos por aquí con sus ropas de baño», recuerda.

Antes de pasar a la aviación civil, Fernández Vázquez fue piloto militar en el Servicio de Ayuda y Rescate Español (SAR) durante años. Según cuenta su vecino Jorge Lasheras, que es mecánico de aviación militar y con el que tenía «mucha amistad», se trataba de un hombre «muy bueno y noble».

Jorge también conocía al comandante del avión MD82 sisniestrado, Antonio García Luna, del que fue compañero y con el que no compartió tantas horas de vuelo, comidas y celebraciones como con José Fernández. Con este piloto, recordaba, «hace poco estuvimos celebrando la despedida de un comandante que se iba a trabajar al servicio de urgencias 112».

Vázquez era conocido por algunos de sus vecinos de Sant Marçal ya que fue vicepresidente de la cooperativa IMBAER, la cual constituyeron para desarrollar la urbanización en la que ahora viven, entre otros, pilotos, militares y personal del aeropuerto en general.

El comandante también fue miembro de la asociación de padres y madres del colegio Costa i Llobera, en el que sus hijos cursaban estudios y donde entabló amistad con el entonces alcalde Miquel Coll, quien ayer lamentaba su muerte tras el minuto de silencio que se llevó a cabo en el centro de salud donde trabaja su viuda.