Nació en Sóller hace 57 años, estaba divorciado y del matrimonio nacieron dos hijos, que residen en Barcelona. La mayor parte de su vida profesional la pasó en la Ciudad Condal, donde se distinguió por sus éxitos en los arrestos de delincuentes, algunos de ellos muy conocidos a nivel nacional. Sus compañeros de Barcelona le conocían con el apodo de «El Solitario».
En 2004 Manuel Bofill solicitó ser destinado a Palma, y se incorporó en junio del mismo año como jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial, cuando el jefe superior era Eduardo Pérez Extremera. Después estuvo con Elicio Amez y en la última etapa con Tomeu Campaner.
Desde hace unos dos años a Manuel Bofill se le detectó una grave enfermedad, que ha sido la que ha puesto fin a su vida.
Desde hace unos siete días Bofill residía en su casa de Barcelona y estaba de baja. El jefe superior de la Jefatura de Balears, Tomeu Campaner, lamenta «la pérdida de un amigo y compañero. Son unos momentos muy difíciles para todos», dijo ayer tras conocer la noticia.
En estos momentos se están haciendo gestiones para que en los próximos días se celebre un funeral en Palma.
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