Un turista de 18 años abusa de dos niñas a punta de navaja en un hotel de Calas de Mallorca

A la una y media de la madrugada del sábado los agentes de la Unidad Territorial de Costas (UTC) de la Policía Local de Porto Cristo fueron avisados de un incidente grave en un hotel de la zona de Calas. Cuando los funcionarios llegaron se encontraron con que el personal del hotel estaba junto a dos niñas, de doce años y primas, que sufrían un ataque de ansiedad. Los recepcionistas explicaron a los policías que las dos menores, de nacionalidad británicas, acababan de sufrir abusos sexuales por parte de un compatriota que presumiblemente se alojaba en el mismo hotel que ellas.

Las familias de las dos agredidas explicaron que por la tarde un joven inglés había estado causando problemas en el edificio y que había esgrimido una navaja de modo amenazante. Ese mismo sujeto, ya de noche, abordó a las dos primas en las inmediaciones de la piscina del hotel y se las llevó hasta una zona oscura de las inmediaciones, donde les mostró de nuevo el arma blanca y las sometió a abusos sexuales. Cuando por fin las dejó, las dos menores buscaron a sus padres y contaron lo que había sucedido.

Por los datos facilitados por los familiares, y la ayuda prestada por el personal del hotel, los policías de la UTC llegaron a la conclusión de que el pervertido se encontraba todavía en el recinto turístico y advirtieron de que nadie podía abandonar aquellas instalaciones mientras durase la búsqueda del sospechoso. Poco después se encontró la habitación en la que se alojaba, con su padre, y varios agentes irrumpieron en ella. La reacción del progenitor fue de lo más extraña y cuando los funcionarios procedieron a la detención de su hijo, aquél apenas se inmutó y salió del cuarto dando a entender que ya estaba al tanto de lo que había ocurrido con las dos primas británicas.

Fue entonces cuando el sospechoso, de forma espontánea, reconoció que había utilizado una navaja con las dos menores y que las había sometido a abusos sexuales, consistentes en tocamientos en sus partes íntimas.

Precintada

Paralelamente a la detención, otros agentes habían estado examinando el lugar donde se produjeron los abusos y encontraron, no muy lejos de allí, el arma blanca utilizada por el joven turista para amedrentar a sus víctimas. El objeto punzante fue precintado como prueba del caso.

El individuo, cuya identidad no ha sido facilitada, fue trasladado en un vehículo policial hasta los calabozos, donde pasó la noche. Al día siguiente, al parecer, fue presentado ante el juez de guardia de Manacor, que le tomó declaración. El joven, que acababa de cumplir la mayoría de edad, pasaba unos días de vacaciones con su familia en Calas de Mallorca.

La fría reacción que mostró el joven inglés cuando fue detenido de madrugada en la habitación de su hotel hace pensar a los policías que quizás tenga antecedentes en su país por delitos semejantes.