El miércoles una empleada de una conocida perfumería llamó a la policía alertando de dos parejas sospechosas que se encontraban en el establecimiento. Cuando lo agentes llegaron al negocio los extranjeros ya se habían marchado, pero los empleados facilitaron sus características físicas y uno de ellos fue interceptado en la calle, no muy lejos de allí.
El hombre llevaba encima frascos supuestamente sustraídos y dijo que no sabía nada de sus compañeros desaparecidos. Sin embargo, en ese momento le sonó el teléfono móvil y la policía vio que la persona que llamaba era un tal Violel. Al poco volvió a llamar, desde una cabina, y los agentes la localizaron. Estaba junto a la estación de Manacor y varias patrullas acudieron hasta allí. Minutos después detuvieron a los otros cuatro rumanos implicados en el robo, y recuperaron perfumes por valor de 1.500 euros. Las identidades de los integrantes de la banda no han trascendido, y los acusados ya han sido puestos a disposición judicial, en Manacor.
2 comentarios
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tranquilos, en dos dias o menos estan en la calle robando otra vez.
como no tenemos vastantes ladrones en mallorca nos vienen de fuera tenemos a los politicos k esos son los peores y estan en la calle estos tb en nada estaran haciendo otra por otro lado y asin funciona españa viva la pepa