'El Ove' tras ser detenido en agosto de 2011 durante la 'operación Guaraná'. | JAUME MOREY / JOAN TORRES / J. L

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Primera condena para 'El Ove', uno de los narcotraficantes emergentes de Son Banya, detenido en tres operaciones policiales distintas. La Audiencia Provincial de Palma ha impuesto penas que suman 34 años de prisión para el principal acusado, su mujer y otras seis personas. Juntos mantenían abierto en el año 2006 un punto de venta de droga en la calle Dos del poblado de Son Banya que, según las estimaciones de la policía podía llegar a facturar hasta 3.000 euros a la hora y que permanecía abierto de forma ininterrumpida. La condena para el principal acusado y su esposa queda en 4 años y medio al apreciar la Sala un atenuante por el retraso en llegar a juicio de la causa.

La sentencia establece la relación jerárquica que existía para llevar el día a día del punto de venta. 'El Ove' y su mujer actuaba prácticamente como empresarios. Contaban con dos proveedores, un matrimonio formado por 'El Josete' y 'La Bombi' y tenían a su cargo personal encargado de la atención al público. Éstos funcionaban con turnos de trabajo. Otro de los acusados era el transportista. Durante varias páginas, la sentencia reconstruye esta organización a través de las conversaciones telefónicas interceptadas al clan. En ellas se utilizan eufemismos como 'niños' o 'ruedas' para hablar de cocaína. Las conversaciones muestran desde reproches a los vendedores por llegar tarde al trabajo a quejas por la mala calidad de la coca que les suministraban «los valencianos».

Estas conversaciones telefónicas fueron impugnadas con ardor por la defensa de 'El Ove' que también planteó la nulidad del registro de la vivienda -en el que se encontró una pistola además de droga- y las analíticas de la droga. La Audiencia rechaza todos los argumentos del letrado.

'El Ove' hasta ahora ha sido detenido en tres operaciones policiales contra la droga en Son Banya. La primera es ésta por la que ha sido condenado en 2006. Además fue arrestado en 2010 en la 'operación Zenith', en la que se intervino un kilo y medio de cocaína y otra vez en la 'operación Guaraná' el año pasado. Es hijo de 'El Juanele', al que se sitúa al frente del clan de 'los Bizcos'. Gabriel Amaya González, su verdadero nombre, tiene ahora 29 años de edad.