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Siempre juntos. Andreu Coll Tur, de 18 años, y Fran Abas Rodríguez, de 20, pasan todo el día juntos en la prisión de Palma y sólo se separan para dormir. Los dos jóvenes no muestran de momento síntomas de arrepentimiento, aunque preocupa el estado del zaragozano y su dependencia absoluta con respecto a su amigo mallorquín, del que confesó estar enamorado.

La pareja que asesinó al empresario de Alaró lleva casi una semana en prisión y ocupan celdas distintas en Enfermería, cada uno de ellos con un preso de apoyo, que los vigila para que no intenten suicidarse.

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Cuando son despertados, los dos muchachos se reúnen en un área común y después pasan todo el día juntos, aunque se separan una hora después de comer, cuando deben regresar a sus celdas. Andreu, de acuerdo con las fuentes consultadas, es «muy frío, como si la historia no fuera con él». En todos estos días no ha mostrado ningún síntoma de arrepentimiento, aunque se relaciona casi exclusivamente con su amigo y con el preso de apoyo que le han impuesto.

Fran, en cambio, muestra un perfil de dominado muy diferente al de Andreu. Para cualquier cosa requiere la presencia de su amigo y en ocasiones está abatido y deprimido, a diferencia del mallorquín, que en apariencia está muy entero.

Los dos asesinos confesos han sido visitados por una psicóloga y pasado un tiempo, cuando estén más centrados, dejarán el área de Enfermería y pasarán a otro pabellón. De momento, no han tenido ningún incidente con otros internos, aunque ambos procuran pasar desapercibidos y no buscan problemas.

Andreu y Fran se conocieron en el juego online Call of Duty, al que dedicaban horas y horas, y después se hicieron muy amigos. El zaragozano viajó a Mallorca y ambos planearon el crimen del padre de Andreu, al que destrozaron la cabeza a golpes.