Borja Rupérez Muñoz fue gerente y director financiero de IB3 en 2011, aunque mantuvo el cargo de forma efímera. | Redacción Local

TW
30

El exgerente y exdirector financiero de IB3 Borja Rupérez Muñoz fue detenido recientemente por el Cuerpo Nacional de Policía acusado de un delito de robo con violencia e intimidación. La millonaria abuela de su mujer sufrió un asalto en su lujoso chalet de León por parte de seis encapuchados armados que se llevaron joyas y efectos de valor. Los investigadores vinculan a Borja y a su esposa con esos acontecimientos.

La víctima, de avanzada edad, se encontraba sola en su mansión de la carretera de Carbajal, en la provincia de León. Se trata de una zona de chalets de lujo y el pasado mes de julio seis desconocidos asaltaron la casa y maniataron a la señora, que les plantó cara. A continuación, registraron las dependencias, pero un detalle despertó las sospechas de la anciana: los hampones sabían muy bien dónde miraban, como si tuvieran información privilegiada. Antes de huir se llevaron 5.000 euros en efectivo y al menos dos sortijas de oro, aunque otras fuentes señalan que el botín fue bastante mayor.

Noticias relacionadas

La víctima, tras liberarse, denunció los hechos y la Policía Judicial de León, en colaboración con la UDEV (Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta), buscó a los seis delincuentes. Desde el primer momento quedó claro que alguien de la familia o allegado a ella había facilitado información, lo que en términos policiales se conoce como tener «un santero».

El pasado 22 de octubre, la policía confirmó que cuatro hombres habían pernoctado la noche antes del asalto en León, y luego se habían marchado. Poco después, fueron arrestados cinco varones y una mujer. Borja Rupérez y su esposa Vanesa Vázquez, hija de un conocidísimo industrial de León ya fallecido, fueron arrestados en Madrid por su supuesta implicación en el robo en la casa de la abuela de ella. Tras prestar declaración, quedaron en libertad con cargos. A la banda se le intervino dos pistolas de gas, equipos informáticos, un BMW de alta gama y documentación comprometedora.