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Los braseros siguen provocando incendios en Mallorca. Ayer, con pocas horas de diferencia, se declararon dos fuegos en casas de Can Picafort y de Palma. En el primer siniestro nadie resultó herido, pero en el segundo una mujer y su hijo resultaron intoxicados.

De acuerdo con los datos facilitados por los equipos de emergencia, el incendio de Can Picafort se produjo sobre las 1,49 horas de la madrugada, en la calle Iglesia número 45. Los Bomberos de Mallorca se movilizaron rápidamente por si había personas atrapadas en el interior, aunque afortunadamente los daños sólo fueron materiales.

Horas después, ya al mediodía, una vivienda de la calle Adrià Ferran, cerca de la barriada palmesana de Son Gotleu, registró otro siniestro cuyo origen fue un brasero encendido. Los Bomberos de Palma y la Policía Local acudieron rápidamente hasta esa dirección y atendieron a una mujer y su hijo, que habían resultado intoxicados por inhalación de humo.

El brasero, al parecer, incendió unas cortinas de la sala, aunque el fuego no se propagó por el resto de la vivienda. El humo, sin embargo, se acumuló en toda la casa y fue lo que provocó dificultades respiratorias a la madre y el pequeño. Los dos, empero, se recuperaron y no fue necesario que los evacuaran una ambulancia hasta un centro hospitalario.