El padre de Malén Ortiz durante su comparecencia en los juzgados de Palma. | Alejandro Sepulveda Soler

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Alejandro Ortiz, padre de Malén, la adolescente desaparecida en Calvià a finales del año pasado, fue juzgado ayer en Palma por una falta de amenazas a su exsuegra.

El abogado de la denunciante reclamó 20 días de multa a razón de seis euros diarios para Ortiz y que también se le imponga una orden de alejamiento durante seis meses, al considerar que es responsable de una falta de amenazas leves. La vista se celebró en el Juzgado de Instrucción número 11 de Palma y los hechos quedaron vistos para sentencia.

Una mañana del pasado verano, la denunciante explicó que Ortiz la amenazó y también empezó a recibir mensajes intimidatorios desde la oficina de la empresa de Alejandro, de forma continua, hasta en 148 ocasiones.

La denunciante afirmó también que Ortiz, en anteriores ocasiones, la amenazó con agredirla.

Alejandro manifestó que él no la amenazó directamente esa mañana pero sí admitió que dijo a su secretaria que le hiciera llegar los mensajes intimidatorios. Según él, se debe a que su exsuegra tiene pertenencias suyas valoradas en más de 3.000 euros que quiere recuperar y por ello le hizo llegar el ‘recado'.

La empleada de Alejandro admitió ante el juez que amenazó a la exsuegra porque él así se lo había ordenado y dijo que se sentía incómoda porque también es amiga de la denunciante al haber trabajado con ella varios años.