El fiscal del caso Asunta ha advertido este miércoles al jurado popular de que «el portátil de Alfonso -Basterra, el padre adoptivo de la menor, y uno de los dos acusados de su muerte, junto a su exmujer Rosario Porto- costó encontrarlo».
«Tiene su relevancia», les ha indicado en una larga exposición en la que el representante del Ministerio Público, Jorge Fernández de Aránguiz, se ha presentado y ha explicado a los miembros del jurado cuál será su papel en el juicio que desde este martes y hasta finales de octubre tratará de determinar quién acabó con la vida de la niña en septiembre de 2013.
Después de que se rechazase la petición de las defensas de restricciones a la cobertura informativa del juicio, el secretario judicial ha dado lectura a los escritos de calificación de las partes, y ha tomado la palabra, en primer lugar, el fiscal Fernández de Aránguiz.
Mientras Basterra se muestra serio y reflexivo durante esta primera jornada en la que han sido trasladados desde el centro penitenciario de Teixeiro hasta los juzgados de Santiago, Porto está cabizbaja e incluso ha llorado, como después de que el presidente del tribunal decidiese permitir la retransmisión de imágenes del proceso, en contra de lo que reclamaron las defensas.
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