Agentes de la Policía Nacional saliendo del cuartel durante las últimas diligencias practicadas. | Alejandro Sepúlveda

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El juzgado de Instrucción número 12 procedió este martes a la imputación de otros dos policías locales de Palma. En esta ocasión, los argumentos presentados por la Fiscalía Anticorrupción responden al supuesto encubrimiento de unas amenazas vertidas por Jaime G., portavoz del sindicato CSIF contra un oficial de la USEI.

Uno de los agentes que presenció los hechos aseveró que si bien él no se había sentido amenazado por el sindicalista, considera que otros efectivos policiales sí han podido sentirse intimidados ante las advertencias y comentarios formulados. En su declaración, el testigo también puntualizó que oyó a Jaime G. realizar comentarios de advertencia a otro agente consistentes en decir que tuviera cuidado con lo que decía ante el juez, porque se querellaría contra todos aquellos que hablasen en contra de determinados imputados. «Daba la sensación de que Jaime G., era el portavoz de los imputados», remarcó el testigo.

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También hizo mención en varias ocasiones a que, a su juicio, las palabras del portavoz sindicalista eran un aviso para navegantes en el sentido de que tenían que tener cuidado con lo que comentaban.

Junto al declarante también comparecieron otros dos agentes que habían sido citados como testigos y que finalmente, en mitad de su interrogatorio, el juez le comunicó su imputación. Se trata de los policías José B. y José Ramón C. Durante su intervención, los imputados afirmaron que no advirtieron amenaza alguna. Por su parte, Ultima Hora contactó ayer con el sindicalista Jaime G., quien afirmó: «Hemos decidido desde el sindicato CSIF no realizar declaraciones ni entrar al trapo. Lo único que podemos pedir es respeto a la presunción de inocencia de los implicados y que se deje trabajar a la autoridad judicial».