Momento en el que el detenido, con sudadera azul, pasa a disposición judicial. | Teresa Ayuga

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El detenido por el homicidio registrado en Gomila durante la noche del 24 al 25 de diciembre ha pasado este miércoles a disposición judicial.

Agentes del Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a primera hora de este martes a su detención. El autor del crimen se personó en la Jefatura de Policía donde confesó los hechos y apuntó a que la muerte de Michael Andrés fue en defensa propia.

El homicida confeso, según fuentes próximas al caso a las que ha tenido acceso Ultima Hora, declaró ante los investigadores que se vio envuelto en una reyerta y que lo único que hizo fue tratar de defenderse de una agresión por parte del ahora fallecido. También destacó que actuó en todo momento en defensa propia y que huyó del lugar permaneciendo escondido hasta el día que accedió a entregarse por miedo a lo que podía suceder.

La reyerta con resultado de muerte se produjo en las escalinatas que unen las calles Joan Miró y s'Aigo Dolça. Según las primeras hipótesis de la investigación, en la zona se encontraba una pareja de novios junto a varios compatriotas colombianos. En un momento dado, el agresor confeso comenzó a meterse con la novia de la víctima quien salió en su defensa. A partir de ese instante, uno de los implicados cogió una botella, la rompió contra los escalones mientras que su oponente cogía un trozo de cristal. Acto seguido, ambos se enfrentaron y se agredieron mutuamente. Michael Tomás, de 26 años, recibió un corte en la carótida que le hizo perder más de dos litros de sangre. El agresor se daba a la fuga aprovechando el descontrol y nerviosismo generado en el lugar.

La novia de la víctima y la hermana de ésta identificaron de manera incorrecta a un colombiano de 33 años al que la policía detuvo unas horas más tarde de producirse la pelea. A última hora de la tarde de este martes, las mismas mujeres se desdijeron y reconocieron al nuevo detenido como el autor del crimen.