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Un guardia civil se enfrenta a una pena de cuatro años de cárcel por golpear con un vaso de cristal a un compañero en un bar de copas del Paseo Marítimo de Palma. La Fiscalía pide una indemnización de 86.149 euros para la víctima por las graves heridas que sufrió y las secuelas.

La agresión ocurrió sobre las cuatro menos cuarto de la madrugada del 1 de septiembre de 2013. El acusado, de 31 años, se encontraba en el interior de un local situado en el número 30 de la avenida Gabriel Roca.

Vaso de cristal

El encausado propinó a su compañero un fuerte golpe en la frente con un vaso de cristal que se rompió. El perjudicado, a causa de la violencia del impacto, quedó aturdido. El agresor le agarró el cuello con el brazo por la espalda y ambos cayeron al suelo en el forcejeo. El herido sufrió múltiples lesiones y hematomas. Estuvo tres días hospitalizado y dos años y tres meses en rehabilitación tras la agresión.

Las secuelas, según considera el Ministerio Fiscal en su pertinente escrito de acusación, «pueden determinar limitaciones de determinadas actividades físicas durante el desarrollo de su actividad laboral como guardia civil».
De esta manera, la Fiscalía reclama al acusado que indemnice a la víctima con un total de 33.227 euros por las secuelas y con 52.922 por la incapacidad temporal del agente lesionado.