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Dos conductores han sido cazados por la Guardia Civil cuando circulaban a 300 km/hora por la M50 a la altura de Boadilla del Monte, en Madrid. Según ha informado Juan Ignacio Zoido, Ministro del Interior, a través de su cuenta de Twitter, uno de ellos ha sido ya identificado gracias a la colaboración ciudadana.

La Guardia Civil busca al segundo conductor. Al parecer ambos participaban en una carrera ilegal.

Según el Instituto Armado, las imágenes habían sido publicadas en diversas redes sociales cuando conducía a esa velocidad entre los kilómetros 73 y 75 de esta carretera, en el marco de una presunta carrera ilegal con otro vehículo implicado, y se le acusa de delito contra la seguridad vial.

Este delito puede ser castigado con penas de prisión de 6 meses a 2 años y privación de derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a 1 y hasta 6 años.

La investigación se inició cuando el Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (G.I.A.T.) del Sector de Tráfico de la Guardia Civil de Madrid tuvo conocimiento de la difusión de unas imágenes, aparentemente delictivas, a través de las redes sociales Facebook y Youtube. Los agentes examinaron las imágenes, en las que se observaba dos vehículos, uno de ellos conducido por el investigado en la que realizaban una conducción temeraria en lo que probablemente fuera una carrera ilegal entre ambos.

Fruto de las gestiones practicadas, así como del análisis de los documentos gráficos disponibles, se ha logrado identificar a uno de los pilotos de la supuesta carrera ilegal después de difundir el video en las redes sociales.
La operación ha sido desarrollada por el Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (G.I.A.T.) del Sector de Tráfico de la Guardia Civil de Madrid. Esta persona investigada ha sido puesta a disposición del Juzgado de Instrucción de Majadahonda (Madrid).

Las investigaciones siguen abiertas para identificar al piloto del otro vehículo que circulaba en la presunta carrera ilegal.

Además, el Instituto Armado subraya que la colaboración ciudadana resulta «crucial», como ha ocurrido en este caso, por lo que desde la Guardia Civil se apela a los ciudadanos para que tan pronto como detecten una de estas situaciones se avise con la mayor brevedad a los teléfonos 062 de la Guardia Civil o 112 de emergencias, al objeto de poder interceptar y evitar este tipo de conductas que puedan provocar accidentes.