El empresario Bartolomé Cursach, en los juzgados de Via Alemania. | Alejandro Sepúlveda

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El hijo de Bartolomé Cursach irá a juicio por un delito de injurias y calumnias al juez Manuel Penalva y al fiscal Miguel Ángel Subirán. La pieza separada del caso que le investigaba por suplantar a un testigo protegido en una página web ha sido cerrada por el nuevo instructor y está a la espera de calificacion fiscal. Entonces dejó un comentario en el que con el nombre de este testigo afirmaba haber sido presionado por los dos funcionarios para mentir en la causa. A partir de ahí, el testigo protegido presentó una denuncia y la Policía Nacional abrió una investigación y localizó que el comentario fue realizado desde el ordenador de la casa de Bartolomé Cursach júnior. Sse le imputa por un delito de injurias y calumnias.

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Este jueves la defensa del empresario reiteró ante la Audiencia Provincial la petición de que quede en libertad. El recurso se basa en que no existe riesgo de destrucción de pruebas ni de fuga y argumenta que Bartolomé Cursach ya ha consignado 50 millones de euros en la causa como fianza de responsabilidad civil.

También señala que es el único de los imputados que se encuentra en prisión y pide que se le aplique, al menos un trato similar al de otros como su ‘número dos', Bartolomé Sbert, en libertad tras abonar una fianza de medio millón de euros. El fiscal, Miguel Ángel Subirán, se opone y reclama que se mantenga la medida. Entre otros motivos, aludió a la causa seguida por la denuncia de un testigo protegido contra tres abogados.