Una de las reclamaciones se produce por el fracaso de la discoteca Pachá en Palma. | Pere Bota

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La principal acusación particular contra Bartolomé Cursach reclama ocho millones en indemnizaciones a los 24 acusados en la pieza más importante contra el empresario. Esta acusación reúne a varios empresarios que sostienen que sus negocios de hostelería fueron acosados por la policía en función de órdenes del empresario tanto en Palma como en Calvià.

En su acusación mantienen prácticamente los mismos hechos que la Fiscalía, si bien añaden el daño concreto sufrido por estos empresarios en negocios como Pachá o la discoteca Divino.

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Por este último negocio, impulsado por el empresario Ángel Ávila, reclaman por daños valorados en dos millones y medio de euros. Además suman un millón más para cada uno de los seis acusadores.

Penalmente, acusan a Cursach y al ‘número dos', Bartolomé Sbert, de delitos de integración en grupo criminal, coacciones y prevaricación y les reclaman penas de 9 años y medio de cárcel, un año más que Fiscalía. Incluyen en el escrito a las mismas 24 personas que Anticorrupción, entre ellos policías locales y funcionarios como la exdirectora general Pilar Carbonell. En esta causa también acusa la Abogacía de la CAIB.