Piden 10 años de cárcel por abusos a una discapacitada en el cementerio de Artà

Los hechos tuvieron lugar entre el 13 y el 15 de mayo. El ministerio fiscal recoge en su escrito de acusación que el hombre quedó con la perjudicada, que tiene 31 años, para ir en bicicleta al cementerio de Artà a visitar las tumbas de los suegros y del padre de la mujer.

Una vez allí, el acusado la llevó al lado de una puerta metálica y se besaron. Ella le dijo que no quería mantener relaciones sexuales con él y a pesar de la advertencia el hombre le tocó los pechos y la condujo hasta el baño del cementerio, donde la desnudó y la penetró. Un día después, el procesado acudió al domicilio de la víctima, en Canyamel, que se encontraba sola. El hombre la besó en la habitación, en contra de la voluntad de la chica, y la volvió a forzar.

Días posteriores, el agresor volvió a la casa de la joven, que estaba sola, y le pidió que le masturbara. La víctima se negó y el hombre le pidió una felación y la joven le volvió a rechazar. El hombre se masturbó delante de ella y se marchó.

La joven sufre una discapacidad del 49 %. Una circunstancia que el agresor «conocía y utilizó para sus fines», según el fiscal. El acusado tiene antecedentes por hechos similares. Estuvo siete años y medio en la cárcel por una agresión sexual en 2012. El 2 de febrero del año pasado salió de prisión.