Una gamberrada que pudo acabar mal. Un joven fue sorprendido la noche de Navidad circulando con una excavadora de una obra, que previamente había puesto en marcha, y acabó clavando el martillo percutor en la iglesia de la Mare de Déu dels Àngels, en Pollença. El joven terminó en dependencias de la Policía Local por la 'broma'.
Los hechos, tal y como han confirmado fuentes policiales, ocurrieron sobre la 1 de la madrugada cuando el menor de edad, en compañía de otros amigos, se subió a la máquina excavadora, la puso en marcha y circuló por las inmediaciones de la Plaça Major. En ese momento había gente paseando por la zona y algunos no dudaron en recriminarle la acción al chico. Su trayecto acabó con el martillo percutor clavado en una pared del santuario, provocando daños.
Minutos más tarde el joven terminó declarando en el cuartel de la Policía Local de Pollença. Los agentes avisaron a sus padres de lo ocurrido y acudieron a por él. Ahora, se abrirán diligencias y se enviarán a la Fiscalía de Menores, que se hará cargo del asunto.