Ali Kouch, custodiado por la Guardia Civil, a su llegada a los juzgados de Inca horas después del crimen. | A. Sepúlveda

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Ali Kouch, el hombre que mató a su mujer embarazada y a su hijo de siete años en sa Pobla en mayo de 2021, alega que en el momento de los hechos actuó bajo la influencia de las drogas y el alcohol. Asimismo también sostiene que no sabía que su esposa estaba encinta. En su escrito de defensa, presentado en el juzgado por su abogado, Miguel Ángel Ordinas, solicita que se tengan en cuenta los atenuantes de drogadicción y confesión para intentar eludir la prisión permanente revisable, que solicitan tanto la Fiscalía como la acusación particular, que ejerce la letrada Isabel Fluxá.

«El acusado, desde el año 2007, es consumidor de alcohol y drogas, principalmente cocaína y heroína, en cantidades variables en función de su disponibilidad económica», apunta su abogado en el documento presentado en el juzgado de Instrucción de Inca.

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El abogado del autor confeso del crimen considera a Ali Kouch, de nacionalidad marroquí, y que se encontraba en situación irregular en España, autor de un doble homicidio. Y lejos de la petición de cadena perpetua de las acusaciones, solicita doce años de prisión para el procesado por un doble homicidio. También espera que dichas penas sean sustituidas por la expulsión del territorio nacional cuando haya cumplido dos terceras penas de la condena.

Los hechos por los que Ali Kouch será juzgado próximamente por un jurado popular en la Audiencia de Palma ocurrieron la noche del 16 de mayo de 2021 en el domicilio en el que convivía con las víctimas en la calle Santa Catalina Thomàs de sa Pobla. El acusado, de 38 años y nacionalidad marroquí, discutió con su pareja, Warda Ouchene, y le golpeó en varias ocasiones. A continuación la estranguló, según la Fiscalía «provocándole una muerte agónica» en presencia de su hijo. La mujer, de 28 años, estaba embarazada de un bebé. El acusado, según el escrito de la acusación pública, también estranguló a su hijo hasta provocarle la muerte. Después de matar a su mujer embarazada y al menor cerró la puerta de la vivienda con llave y se dirigió en coche a Palma, donde fue detenido al día siguiente.

Su defensa incluye en el escrito presentado en el juzgado que Ali Kouch contactó por teléfono con los familiares de su mujer y la Guardia Civil y confesó que la había matado a ella y a su hijo. Asimismo también reconoció los hechos cuando fue arrestado por la Policía Nacional en Palma y durante las sucesivas declaraciones en sede judicial. «El acusado ha colaborado en todo momento con la investigación policial y judicial», sostiene Miguel Ángel Ordinas.