La Policía Nacional y la Guardia Civil han dado por concluidas las gestiones policiales en el marco de la investigación conjunta que han llevado a cabo para lograr la restitución del menor a dicha localidad menorquina, según han informado en nota de prensa. Los hechos se remontan al verano del año pasado cuando la madre, junto con el menor, se marchó de Menorca a Extremadura para disfrutar de unas vacaciones; aunque su plan era no volver, lo cual precipitó el inicio de la investigación.
Una vez el padre interpuso la correspondiente denuncia de sustracción del menor, se inició la búsqueda por la región extremeña por parte de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil en Badajoz en coordinación con la Unidad UFAM de la Policía Nacional en Ciutadella. Al no dar con su paradero, los agentes ampliaron el rango geográfico de búsqueda del menor y de su madre, añadiéndose a la investigación otras unidades centrales como la UFAM central y sección de fugitivos de la Policía Nacional.
Según las investigaciones, su abogado se había quedado con la tarjeta de crédito de la madre e iba sacando periódicamente dinero de diferentes cajeros en la isla de Menorca, hasta el límite máximo permitido en la tarjeta, y se lo hacía llegar a través de diferentes medios «para evitar dejar rastro», con envíos de entre 300 y 500 euros «para no levantar sospechas». Posteriormente, la madre sacaba el dinero de diferentes puntos de Bruselas (Bélgica) «sin repetir el lugar para dificultar aun más su localización», ha relatado la Policía.
Una vez conocido el país donde estaban escondidos la madre y el menor, se iniciaron las gestiones con la Agregaduría de Interior en Bélgica y el juzgado de instrucción para tramitar Orden de Detención y Entrega coordinándose con la Fiscalía belga. La madre pudo ser detenida por la policía belga, haciéndose cargo del menor y poniéndola a disposición judicial; la impusieron medidas cautelares desde un inicio. El padre, junto con su abogada, se desplazó hasta Bélgica para después de numerosos meses poder ver finalmente a su hijo y volver a su hogar en la isla de Menorca.
El pasado 2 de febrero se detuvo al abogado de la madre por parte de la UFAM de Ciutadella, como presunto autor de los hechos y se imputó a una amiga de la madre por parte de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Badajoz por su implicación en el caso. Una vez se desplazó la madre a España los agentes la detuvieron como presunta autora el 15 de marzo en el aeropuerto de Madrid-Barajas por parte del grupo de Fugitivos de la Policía Nacional, ingresando provisionalmente en prisión preventiva en el Centro Penitenciario de Alcalá Meco. Tras los correspondientes recursos, la madre se encuentra ahora en libertad a la espera de juicio con el resto de imputados. Sin embargo, le constan entre otras medidas de protección al menor, la retirada de su pasaporte y la prohibición de salir del territorio nacional.
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