La Policía no halla cadáveres tras inspeccionar 50 vehículos en el aparcamiento de Bonaire

Imagen de efectivos de la Policía Nacional en el aparcamiento de Bonaire en la localidad de Aldaia, donde existe un gran temor por las inundaciones provocadas por la DANA en Valencia. | Policía Nacional

EfeFernando FernándezPalma04/11/24 11:55Actualizado a las 19:34
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La Policía Nacional y la UME no han encontrado ninguna víctima mortal tras haber inspeccionado el garaje del centro comercial Bonaire, en Aldaia (Valencia), arrasado por la DANA del pasado martes. Durante el día, la Policía Nacional, tras las primeras aproximaciones al terreno al achicarse el agua acumulada en esa infraestructura, apoyándose en cuatro drones, junto a personal de la UME y de los bomberos, descartó la presencia de cuerpos entre el primer medio centenar de vehículos inspeccionados.

Con el paso de las horas, las esperanzas fueron multiplicándose al no hallarse restos de fallecidos, pulverizando todas las previsiones alarmistas que, hasta este lunes, hacían pensar en una gran cantidad de fallecidos. Entrada la tarde, sobre las 19 horas, se cerró una nueva revisión sobre el terreno tras la inicial, sin haber hallado restos de víctimas mortales.

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Los efectivos de la Unidad Militar de Emergencas (UME) que han estado rastreando el aparcamiento siguen realizando achiques ya que no se sabe el número total de vehículos que hay en un aparcamiento que dispone de capacidad para 2.500 plazas y que quedó completamente inundado como consecuencia de la DANA. Se calcula que no llegarían al centenar, toda vez que se ha despejado el terreno.

Durante este pasado fin de semana, la UME ha estado extrayendo agua de ese aparcamiento subterráneo, que se teme que sea uno de los lugares en los que podría haber más fallecidos tras el paso de la DANA. Desde el pasado miércoles hay equipos extrayendo agua y lodo de este centro comercial en las inmediaciones de la localidad de Aldaia, que también ha sido fuertemente golpeado por la tragedia.

El sábado se llevó a cabo una primera batida con un barco, pero la cantidad de agua acumulada tapaba aún los vehículos e impedía ver algo. El domingo se hizo una nueva incursión con una lancha y varios kayaks y varios buzos estaban listos para entrar, pero seguía siendo imposible acceder y extraer conclusiones, lo que alimentó las teorías sobre la cantidad de cadáveres que podrían haber quedado allí atrapados.