Dentro todo cambia porque la luz y la presencia constante de las vistas al jardín se adueñan de casi cada rincón. Desde la cocina a los cuartos de baño, pasando por los dormitorios –cinco, todos con baño en suite– hasta llegar al clímax en el salón de arriba, donde un inmenso sofá semicircular da paso a la contemplación de paisaje, que alcanza aquí la categoría de obra de arte. Por lo demás, es una gran casa de lujo, con calefacción bajo el suelo, jacuzzi, cinco baños y dos aseos, barbacoa, zona de relax junto a la piscina y un enorme terreno que da privacidad.
Interiores
Salón: Impresionante la vista a la piscina, que está diseñada a modo de playa, desde el salón de abajo.
Comedor: Combina con acierto mobiliario de diseño moderno y piezas clásicas, con vistas espectaculares.
Cocina: En negro brillante y con una gran isla doble para desayunar, contrasta con el resto de la casa.
Dormitorios: La casa tiene cinco dormitorios con cuarto de baño en suite y unas vistas espléndidas al jardín Vistas que cortan la respiración.
Salón de arriba: Para maximizar el disfrute de las vistas hasta el mar y Cabrera se ha instalado un salón en la logia.
La piscina: Pocos rincones más apetecibles que esta casi auténtica playa caribeña en el jardín de la casa.
El alzado
Superficie: 430 metros cuadrados
Parcela: 14.630 metros cuadrados
Lugar: Ses Salines
¿Qué la hace diferente? El jardín es el verdadero protagonista de esta casa, que se ha construido pensando en todo momento en las vistas increíbles que proporciona la piscina. Raudales de luz, diseño contemporáneo, muchísimo espacio y todo de lujo
Más información: www.porta-mallorquina.es
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