El club ha reaccionado con un comunicado en el que destaca la gran labor de Ingo Volckmann al frente del club y destaca que se responsabilizará de devolver la dignidad a estos trofeos. «El club quiere comunicar que, continuando con su tarea de reconstrucción de la historia del Atlético Baleares, procederá a darles a dichos elementos el trato digno que les corresponde, y a garantizar su regreso al Estadio Balear en las condiciones que merecen; dentro del objetivo más amplio de impulso del área social contando para ello con la colaboración tanto de la Comisión Social de La Fundació Atlètic Balears, como de las peñas y aficionados a título individual».
Explica la entidad blanquiazul que «las circunstancias del cierre del Estadio Balear en su momento, pusieron en peligro de desaparición trofeos y elementos del club que se han conservado por quienes los pudieron salvar en su momento, como buenamente han podido».
El mismo comunicado se inicia destacando las circunstancias en las que Ingo Volckmann llegó al club. «La historia del CD Atlético Baleares no ha sido fácil, a la llegada de la actual propiedad, hace nueve años, el club se encontraba en concurso de acreedores, compitiendo en Magalluf, con el Estadio Balear cerrado y en estado de ruina; con lo que todo ello supuso para el fútbol base y a la masa social», recuerda el ATB en su escrito.
«A su llegada al club, Ingo Volckmann concluyó el concurso de acreedores, el 16 de enero de 2015. Con errores y aciertos, la propiedad, con la ayuda inestimable de muchos balearicos, fue devolviendo al club a la normalidad, logrando el anhelado regreso al Estadio Balear». «Más allá de los logros deportivos, y de las decepciones que siempre acompañan a este deporte, se ha trabajado para fortalecer el fútbol base y el sentimiento balearico, debiendo dar las gracias a todos los seguidores que ayudaron a una emocionante celebración del 75 aniversario del club, plagada de documentos y símbolos reflejo de nuestra historia; consiguiendo recuperar poco a poco retazos de la misma, entre ellos el Trofeo del partido inaugural del Estadio Balear disputado contra el Birmingham en 1960, y que fue presentado a la afición esta pasada temporada».
En su comunicado se recuerda concluye con la idea de que se va a dar a los trofeos amontonados en una cochera de Llubí «el trato digno que les corresponde».
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