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El portero del Barcelona Roberto Bonano confesó que siente «impotencia» por no poder revertir la crisis que atraviesa el equipo azulgrana, a la que no encontró otra explicación que la de un mal estado anímico del equipo. «Cada vez que nos toca perder pensamos que tiene que ser el último partido y debemos recuperarnos pronto. Y lamentablemente no se está dando», se lamentó Bonano, quien consideró que pese a ellos los jugadores tienen «que dar la cara, porque uno no puede esconderse en estas situaciones».

Respecto a la posibilidad de que se destituyera a Louis van Gaal, Bonano consideró que esa es una cuestión hipotética que no debe entrar a valorar, ya que sólo corresponde al presidente y a la junta directiva tomar una decisión así. «Las palabras del presidente hasta ahora son que continuaba el entrenador, que había fichajes y nosotros éramos los que teníamos que sacar las cosas adelante», dijo.

Por ello, subrayó que «nuestra mente está en evitar otra derrota» y que el equipo ha trabajado con normalidad pensando «en el próximo fin de semana, en mejorar la parte anímica y tratar de demostrarlo ganando el próximo partido». Pese a reconocer que los jugadores están «preocupados» por la mala marcha del equipo, Bonano rehusó que se trate de una situación límite y que haya «miedo» en la plantilla. «Miedo no es la palabra, sí preocupación, intranquilidad quizás, porque no llegan los resultados».

«Uno debe demostrar el orgullo, sacar la rabia que siente por todo el clima negativo que se genera», señaló Bonano, quien se quejó de que los problemas pueden pasar por una cuestión anímica. «Otra explicación no encuentro». Carles Puyol, una de las voces autorizadas del vestuario barcelonista, dijo que los jugadores tienen que ser fieles en todo momento al técnico que dirija el equipo. «¿A muerte con el técnico? Sí, los jugadores tenemos que estar con el entrenador, estar con el técnico que esté», dijo Puyol, quien explicó que Van Gaal está anímicamente «tocado».

El lateral explicó que el equipo está muy alicaído. «Son unos cuantos partidos que salimos con muchas ganas y las cosas no salen. Esto es duro», recalcó. Puyol calificó la situación de «muy complicada», pero insistió en que lo que tiene que hacer el equipo es «reaccionar y rápido», porque «esta situación no es buena». «No sé cuál es la solución. Si la supiese la diría. Lo único que tenemos que hacer es ganar partidos, algo que nos daría tranquilidad y confianza», afirmó el defensa, quien considera que el equipo está en esta situación por «méritos propios».