TW
1

Barcelona y Real Madrid se juegan el liderato de Primera división, una parte del título en una Liga de desigualdad con el resto, en un Camp Nou que exhibe el clásico más igualado de las últimas temporadas de absoluto dominio azulgrana, que se ve amenazado por la visita del enemigo número uno: José Mourinho. El último invitado a la fiesta.

España se paraliza un lunes. Llega el clásico. El primer asalto entre los dos grandes. El enfrentamiento de dos formas de entender el fútbol con un mismo fin, el triunfo. Dos maneras de dirigir desde el banquillo, Pep Guardiola ante Mourinho. El duelo de los dos mejores futbolistas del mundo, Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Un mano a mano entre el toque 'culé' y la verticalidad madridista. Una cita que cada temporada supera su expectación para ser un nuevo partido del año.

Llega el Barcelona al día señalado en su mejor momento, con un crecimiento en los dos últimos meses que le hacen igualar la brillantez de su mejor época. Si durante el inicio de campeonato se había mostrado intratable como visitante, las últimas jornadas también han despejado todas las dudas generadas con sus actuaciones en el Camp Nou.

Lo demuestran resultados. Se han deshecho con solvencia de tres de los equipos más importantes de la Liga -Valencia (2-1), Sevilla (5-0) y Villarreal (3-0)- en sus tres últimos partidos como local. Y no sólo ha recuperado la esencia de su fútbol de combinación, velocidad y toque sino que lo ha ido acompañando de una efectividad que le ha permitido firmar el mejor arranque liguero (nueve victorias, un empate y una derrota) de la era Guardiola.


Poderíoa

Noticias relacionadas

El técnico catalán no sabe lo que es perder ante el Real Madrid desde que entrena al Barça. Ha ganado los cuatro clásicos disputados. Su equipo está crecido y además cuenta con la tranquilidad de saber que su gran estrella, el argentino Leo Messi está en estado de gracia. El 'crack' de Rosario lleva diez partidos seguidos marcando -nueve con el Barcelona y uno con su selección- y tiene un cuenta pendiente que espera saldar para mañana: marcarle a un equipo entrenado por Jose Mourinho.
Para este partido, Guardiola sólo tiene la baja del central Gabi Milito, suplente habitual, que se recupera de una rotura muscular. El técnico del conjunto azulgrana podrá por tanto alinear a su once de gala, al que ha estado dosificando en los últimos compromisos. La única duda estará en el lateral zurdo, pues la recuperación de Abidal le da algunas opciones de alcanzar la titularidad en detrimento de Maxwell.

Menos ha rotado Mourinho que también podrá mostrar en el Camp Nou el equipo titular que el madridismo sabe de carrerilla. Regresa una persona odiada por el barcelonismo, que será el centro de las iras junto a Cristiano Ronaldo. Los dos nuevos emblemas del Real Madrid que quieren sacarse una espina clavada: nunca ganaron en el estadio azulgrana.
No lo hizo Mourinho -cinco partidos con tres derrotas y dos empates-, pero acabó con un gran sabor de boca en la última ocasión que pisó el Camp Nou. En las semifinales de Liga de Campeones echó al Barcelona con su Inter de Milán, en un encuentro en el que estuvo metido en todas las polémicas. Gesticuló sin parar, susurró al oído de Guardiola asaltando su zona técnica y acabó mojado por los aspersores cuando celebraba en el centro del campo la clasificación.

Ganasa

Cristiano aún no sabe lo que es ganar al Barcelona. No lo ha hecho en seis partidos y en un duelo con los mejores del mundo, su insaciable hambre se acrecenta aún más si cabe. El astro portugués lo juega todo, quiere conquistar todos los títulos y ser el máximo goleador. Es el referente ofensivo en plena racha blanca. Cuenta por victorias sus últimas siete jornadas.

Con los dos grandes del fútbol español en su mejor momento, mostrando hasta números similares, Mourinho recuperará a última hora a dos de sus titulares que superan lesiones. Khedira e Higuaín podrán ser titulares. Su presencia descartar un cambio táctico y la entrada en escena de 'Lass' Diarra.

El Real Madrid saltará al Camp Nou exhibiendo sus señas de identidad. Una defensa solida, un fútbol eléctrico que parte de Xabi Alonso y un ataque repleto de velocidad y pegada con tres puñales, Cristiano, Di María y Ozil, y un goleador como Higuaín. No estarán para la cita jugadores como Garay, Gago y Kaká. Los clásicos del Camp Nou tiene claro color azulgrana: 46 victorias, 17 empates y 18 derrotas. El Real Madrid viaja con más fe que nunca para acabar con la hegemonía de los últimos años y no salir derrotado por tercera temporada consecutiva. El clásico está servido.

Encuesta
La votación está cerrada
1518 votos
39%
61%