Moyà liquida al número uno

Este marcador enrabietó a Moyà, que se adjudicó el cuarto juego dejando en blanco al australiano . A partir de ese instante, el mallorquín desplegó su mejor tenis aprovechando dos pelotas de «break» en el siguiente para colocarse 3-3. En esos instantes Moyá estaba realizando sus mejores minutos de juego. Le pegaba fuerte a la bola y el australiano era incapaz de responder hasta el punto que Moyà le rompió por segunda vez el servicio en el noveno juego. Le bastó una pelota de break para después mantener su servicio y adjudicarse el set por un definitivo 6-4 en 44 minutos.

El partido se reanudó con gran igualdad cada jugador mantenía su servicio pero Moya le daba menos velocidad a la bola, pero a pesar de ello Hewitt no pudo mantener su saque en el quinto juego ganando claramente por el malorquín, en ese intenta todo hacia indicar que serie definitivo la ruptura de servicio, pero una vez más apareció el bajón de juego de Carlos y no pudo mantener su saque en el octavo juego y a partir de ahí llegaron los minutos de desconcierto para los dos jugadores acertanto bolas increíbles y fallando otras mucho más fáciles.

La responsabilidad le pesaba al número uno del mundo y a Moyà el haber perdió la ventaja de poder finiquitar el partido al perder su saque. El desenlace final fue de infarto Moyá volvió a hacer de las suyas y desaprovechó nada más y nada menos que cuatro pelotas de partido una de ellas un mate con toda la pista para él. La mandó fuera de la pista ante la mirada perpleja de su rival y el asombro del propio jugador mallorquín. Tras esos instante se vivieron minutos de alta tensión entre ventaja e iguales Moyà gracias a sus mejor servicio se llevó el set y el partido.