El catalán, que este año contaba con todo lo necesario (moto y
equipo) para cumplir su sueño de ganar el Dakar, vio como en el
kilómetro 130 de la especial la desgracia volvía a cruzarse en su
camino y le dejaba fuera de un raid que empieza a ser gafe ya para
él.
Roma rodaba por una zona revirada a aproximadamente 120 km/h, y
en una curva a derecha pasaba por la rodera que habían dejado
algunos vehículos en la zona interior. En la rodera se encontró una
piedra que pudo esquivar, saltando a la rodera exterior, en la que
se encontró con otra de mayor tamaño. El catalán pudo esquivarla de
nuevo con la rueda delantera, pero la trasera se enganchó,
lanzándole por delante de la motocicleta.
El primer piloto en llegar fue el italiano Fabrizio Meoni (KTM),
que encontró al español tendido en el suelo, pero consciente. El
italiano tras hablar con el piloto activó la baliza para avisar a
las asistencias médicas. Justo detrás llegaba el francés Richard
Sainct (KTM), que también paró, hasta la llegada del español Marc
Coma (KTM), que se quedó con su compañero de equipo hasta la
llegada del helicóptero de la organización.
Roma sufrió un traumatismo craneal y dolores al nivel de las
vértebras lumbares que, tras el primer examen al que fue sometido.
El rally Dakar sigue siendo una prueba «maldita» para el español
Joan Roma, que ayer, viernes, ha vuelto a retirarse de una prueba
que ha disputado en ocho ocasiones, que nunca ha conseguido ganar y
que sólo ha acabado una vez.
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