El Real Mallorca pone la directa hacia la gran final

La competición copera es el torneo del Mallorca. El cuadro balear sabe moverse por él y en estos momentos el objetivo es claro: hay que llegar a la final que se jugará el próximo 28 de junio en un estadio todavía por determinar, aunque todo apunta que será en Sevilla. Echando un vistazo a la historia, ésta refleja que el conjunto mallorquinista ha logrado acceder a la final en las dos ocasiones que se ha disputado las semifinales. La primera fue en la temporada 90/91 en la que consiguió deshacerse del Sporting de Gijón y la segunda y más reciente está localizada en el año 99 cuando eliminó al Deportivo Alavés.

En el año 91 el equipo rojillo que entrenaba Llorenç Serra Ferrer jugó el choque de ida de las «semis» en el Molinón y ganó por cero a uno, tanto materializado por Hassan a pase de Miquel Àngel Nadal. La vuelta no tuvo tampoco excesiva complicación para el grupo balear que volvió a superar por la mínima al cuadro asturiano, en este caso gracias a un gol de Àlvaro Cervera poco antes de llegar al final del primer tiempo. La final se jugó en el Santiago Bernabéu contra el Atlético de Madrid y el partido ser perdió merced a un tanto materializado por Alfredo bien entrada la prórroga.

En el mallorquinismo todavía está muy vivo el recuerdo de lo visto en la capital de España como también está todavía muy reciente todo lo ocurrido en Mestalla en el 98 cuando el equipo, que por aquel entonces entrenaba Héctor Raúl Cúper, no pudo alzar el trofeo después de perder en la tanda de penaltis frente al FC. Barcelona. Sin embargo, antes de meterse en la gran final, los rojillos tuvieron que superar las semifinales ante el Deportivo Alavés. Los baleares ganaron los dos partidos. En el primero, jugado en Mendizorroza, Ezquerro en el minuto 45 y Stankovic en el 83 marcaron por el Mallorca.