X. Cruz04/02/03 0:00
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Iván Ramis Barrios (sa Pobla, 25-10-84) se ha convertido en la alternativa tangible a los problemas de enfermería que padece Gregorio Manzano. El central del filial, una de las últimas joyas de la ciudad deportiva, es la opción que maneja el técnico de Bailén para ocupar el hueco que puede dejar Fernando Niño, que sufre una sobrecarga en el muslo derecho, en el partido de Copa: «Sería una gran alegría poder ir convocado a A Coruña», explicaba ayer el futbolista.

Le descubrió con apenas 16 años, a pesar de que asegura que ya le había visto jugar en infantiles y cadetes. Martí Munar fue el técnico que le dio la primera oportunidad en un equipo de cierta entidad y comenta que «ví que tenía unas condiciones extraordinarias, por su físico y por su talento. Era juvenil y le premié con la posibilidad de empezar a entrenarse desde Navidad con nosotros, mientras ya jugaba en el equipo de Preferente. Luego, acabó jugando los últimos cuatro meses con nosotros y acabó siendo campeón de España con los juveniles de Balears».

Todavía no tiene el carnet de conducir, pero la mocedad que anuncia su DNI no tiene nada ver con la madurez que es capaz de exhibir sobre un terreno de juego. Martí Munar le hizo debutar en el primer equipo del Poblense cuando apenas tenía 16 años y ese mismo año estuvo muy cerca de firmar por el Real Madrid. «Me quedé porque aquí tenía a toda la familia, y no me arrepiento. He notado un gran cambio, porque aquí hay más nivel que en Tercera División, por ejemplo», asegura Ramis. Afincado en el Mallorca juvenil, la irrupción por el filial de Juanma Darder -Tomeu Llompart había ascendido al primer equipo- le permitió poder disputar los últimos encuentros de Liga con el Mallorca B. A pesar de que sigue en edad juvenil, Manzano le ha puesto la alfombra para que debute con el primer equipo: «Desde el martes estoy entrenando con ellos. Me han acogido muy bien y es una alegría tremenda poder estar con la primera plantilla y lo sería todavía más si pudiera viajar a A Coruña».

Ante la posibilidad de que se estrene ante el Deportivo de la Coruña, Munar significa que «a los jóvenes les afecta todo, pero yo lo veo muy maduro. No creo que le pueda la responsabilidad en caso de que tuviera que actuar. Tiene una humildad terrible y unas grandes cualidades», agregaba el técnico pobler.

Iván Ramis se convirtió en objeto de deseo de Villarreal, Valencia, Barcelona y Real Madrid durante su etapa como jugador cadete, pero fue el Mallorca el que le pudo convencer para que se convirtiera en uno de los mayores activos del club en Son Bibiloni. Ahora, un par de años más tarde, tiene la oportunidad de alcanzar la gloria si Manzano le convoca.