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Noruega, Holanda y Rusia son los rivales más duros que tendrá España en el sorteo del próximo lunes, después de la última jornada disputada ayer y en la que los de Iñaki Sáez lograron evitar a combinados como Inglaterra o Alemania, que consiguieron el ingreso de forma directa en la Eurocopa de Portugal del 2004.

Inglaterra se aseguró ayer su clasificación directa, pese a verse incapaz de superar un empate a cero contra Turquía y aunque el juego desplegado por los visitantes mostró graves negligencias y fue inferior al de los dirigidos por Senol Gunes. En un ambiente caldeado y sin rastro de aficionados ingleses, la selección inglesa empezó mejor de lo que terminó y aunque durante el primer tiempo mostró solidez en la defensa, pese a la exclusión del zaguero del Manchester United Rio Ferdinand, en el ataque, el plantel de Eriksson cometió errores de novato desde el comienzo de la contienda.

Finalmente, pese a la atmósfera cargada que rodeaba esta noche al Fenerbahce Sükrü Saracoglu Stadium, la historia jugó de nuevo a favor de los visitantes -Turquía nunca ha logrado imponerse al combinado inglés en nueve enfrentamientos pasadosy la selección de Eriksson consiguió su billete para la Eurocopa. Por su parte, la selección rusa derrotó ayer en Moscú a la de Georgia (3-1), con lo que terminó segunda en el grupo 10 y podría ser uno de los rivales de España en la repesca, ya que Suiza finalizó primera al ganar a Irlanda (2-0).

Mientras, Letonia logró el «milagro» en Estocolmo, donde se ganó un puesto en la eliminatoria de «repesca», tras imponerse a Suecia por 0-1 en un partido en el que jugó casi 20 minutos con 10 hombres y tuvo un penalti en contra.

Pese a que Suecia no se jugaba nada en el envite, ya que aseguró la clasificación hace un mes, y jugó con muchos reservas, el triunfo letón lo realza el hecho de que la selección sueca no perdía un partido de clasificación de la Eurocopa desde 1997. El delantero del Skonto Riga Maris Verpakovskis marcó en el minuto 23, pero Letonia no se atrincheró y dispuso de algunas ocasiones para aumentar la ventaja. Sin embargo, la expulsión de Dzintars Zirnis (m.73) y el penalti cometido sobre Marcus Allback, que envió alto el delantero del Aston Villa, acabaron por convertir en heroico el triunfo letón.