Choutos, Okubo, Arango, Yordi, Farinós, Tuni y Jonás, ayer, durante el entrenamiento. Foto: MONSERRAT

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La operación Argentina está en marcha. El secretario técnico del Real Mallorca, Nando Pons, asistió ayer a la última jornada del Torneo Apertura de Argentina, que conquistó Boca Juniors, para darle los últimos retoques a su informe y regresar a la Isla con el trabajo de producción archivado. Un puñado de futbolistas aparecen en el disco duro que maneja el secretario técnico, que ha intensificado los contactos en las últimas horas para amarrar la contratación de un defensa central y un delantero. Lucas Lobos (Gimnasia) y Gustavo Cabral (Racing) son dos de las opciones prioritarias. Al margen del mercado sudamericano, el club también ha extendido sus tentáculos por la Liga y el Viejo Continente.

Los principales inconvenientes que debe afrontar el club balear afecta a la economía. Los clubes argentinos solicitan cantidades astronómicas por jugadores casi desconocidos en nuestro fútbol. Precisamente esa parcela frena, de momento, la incorporación del central Gustavo Cabral, uno de los favoritos por Héctor Cúper para reforzar la zaga y que aparece en la lista de futuribles desde el pasado verano.

Nacido el 14 de octubre de 1985 en Isidro Casanova, Buenos Aires, el club mantiene negociaciones con el Racing de Avellaneda desde que arrancó el verano. El buen Mundial sub-20 que realizó el pasado verano Cabral, uno de los artífices del título conquistado por la selección albiceleste junto al azulgrana Leo Messi y Lucas Biglia, le situó en la órbita de varios clubes. Incluso sus representantes apuntaron a la Juventus de Turín. Entonces, el Mallorca optó por aparcar su contratación.