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Gregorio Manzano medita llevar a la práctica el plan más ambicioso de la temporada. El técnico jienense viajará mañana a Santander con toda su artillería y podría alinear sobre el césped de El Sardinero a Webó, Güiza, Arango, Ibagaza y Jonás. Los cinco galácticos de la plantilla, que todavía no han coincidido nunca de inicio sobre el tapete, moldearían la alineación más ofensiva del curso y reforzarían al equipo con una carga de explosivos extraordinaria.

El máximo responsable del plantel bermellón tiene la última palabra. Mientras aguarda la decisión del Comité Español de Disciplina Deportiva (CEDD) acerca del caso Varela, el de Bailén sigue deshojando la margarita y consume la semana entre la pizarra y los campos de entrenamiento. La dudas que envuelven ahora mismo la figura del centrocampista sevillano le impiden planificar con exactitud el encuentro del domingo ante el Racing, pero sus opciones a la hora de construir el once son más extensas que nunca. Ayer tocaba ensayo general en los campos de la ciudad deportiva Antonio Asensio, aunque las pruebas que se llevaron a cabo no aclararon demasiadas cosas, aparte de que Lux seguirá bajo el larguero y que la defensa será la misma de siempre: Héctor, Ballesteros, Nunes y Fernando Navarro. Pereyra se perfila como el inquilino del vértice inferior del rombo en el centro del campo, con Ibagaza por delante y Jonás a la derecha, ya que en el carril izquierdo aparecen los primeros interrogantes. El técnico tiene el dilema de seguir apostando por Tuni o devolver a esa posición a Juan Arango, que ha firmado los mejores números de su tarjeta pegado a la banda. Si se decide finalmente por el venezolano presentaría un repóquer de lujo sobre el césped cántabro, porque todo indica que Güiza y Webó compartirán la parcela atacante, tal y como hicieron en la primera jornada del campeonato frente al Levante.

Con los cinco futbolistas más desequilibrantes del grupo unidos en el terreno santanderino, el Mallorca presentaría unos argumentos ofensivos rotundos. Al menos sobre el papel. Aunque el hecho de amontonar jugadores de peso no garantiza nada, si que condicionaría la respuesta del conjunto local, que estaría obligado a protegerse más de lo habitual para evitar sobresaltos. Sería un órdago de Gregorio Manzano que no tiene demasiados precedentes cercanos.

Hasta ahora apenas había existido la posibilidad de alinear a los cinco de una tacada. Ni siquiera en el partido de presentación del Trofeu Ciutat de Palma. Manzano prescindió entonces de Arango y unas semanas más tarde, en el estreno oficial del proyecto en la Liga, calcó ese equipo. El venezolano compareció sobre el campo a poco del final para cederle el testigo a Dani Güiza y una jornada después Webó se fracturó el quinto metatarsiano del pie derecho dejando el camino libre a sus compañeros. El camerunés pasó dos meses en la enfermería y no reapareció hasta el pasado 11 de noviembre, coincidiendo con la visita al Santiago Bernabéu. Hasta ahora, la integración del africano en las alineaciones había sido progresiva, pero su reivindicación del pasado domingo ante el Murcia (anotó el gol del empate en el segundo tiempo) le ha devuelto a la primera fila de la caseta. En El Sardinero se hará de nuevo con las riendas del ataque y a falta de una pequeños detalles podría culminar el once ideal de los baleares, el equipo en el que piensan los aficionados a la hora de prolongar el sueño de la UEFA.