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Raúl Lahoz |ZARAGOZA
El Bàsquet Inca no pudo con el sólido líder de la categoría, el CAI Zaragoza, y acabó sucumbiendo 89-64, a pesar del primer buen cuarto que realizó el conjunto visitante y que le permitió empatar 24-24. A partir de ahí, el equipo de Curro Segura impuso su disciplina y sumó una nueva victoria, que le sitúa a las puertas del ascenso hacia la máxima categoría del baloncesto nacional.

El equipo balear visitaba Zaragoza en un día que podía ser de fiesta mayor en la capital aragonesa puesto que, de vencer y pinchando el Bruesa en su compromiso frente al Palma, el CAI ascendería directamente a la Liga ACB después de muchos años de intentarlo sin éxito. Un largo anhelo del equipo de la Liga LEB que más aficionados congrega semanalmente. Finalmente, el equipo guipuzcoano sumó una nueva victoria por lo que las celebraciones deberán esperar, al menos una semana más.

El Inca, no obstante, no acudía a Zaragoza precisamente para convertirse en un convidado de piedra dado que se jugaba mucho en el envite en su afán por intentar mantener la categoría en dura pugna con un ramillete de equipos que apuran sus últimas opciones para decidir entre el objetivo cumplido o el fracaso.

Ya el inicio del partido no fue nada sencillo para los mallorquines, ya que los maños consiguieron situar sin excesivo esfuerzo el marcador en un 8-3 y se distanció hasta el 14-5 en los cuatro primeros minutos de juego. No obstante, en el último tramo del primer cuarto, los insulares reaccionaron y le consiguieron dar la vuelta al partido (21-22), para finalizar 22-22. El Inca fortaleció su defensa y no permitió que los jugadores franquicia del equipo aragonés camparan a sus anchas.

En el segundo periodo, el CAI Zaragoza volvió a reconducir el partido y pronto volvió a sumar ventajas en el marcador. De hecho, la distancia al descanso volvió a ser suficientemente significativa 42-33.

En el segundo cuarto, el equipo local se dejó ir y la quinta falta de Hamilton hundió al conjunto isleño, uno de las referencias anotadoras del equipo. El CAI rodaba con el viento a favor y así era complicado que el equipo de es raiguer pudiera tratar de remontar el encuentro. La fiesta en el graderío se enfriaba a medida que el Bruesa dominaba con claridad su compromiso.

Al final, clara victoria de los zaragozanos ante un Inca que tendrá que seguir luchando en las últimas jornadas para conseguir la permanencia. Tras esta derrota, el conjunto inquer se queda como estaba, con once victorias y veinte derrotas a falta de lo que hagan sus rivales directos y su próximo compromiso será dentro de siete días frente al Ciudad de Huelva.